“¡Conviértete! Sí,
volverme otra, pero no yo,
sino dejarme volver
y convertirme por Dios.
En manos de Jesús,
a su disposición.
¡Que Él obre en mí
y por mí,
Él me reconcilie consigo!
Yo por la humildad desaparecer,
no creerme capaz,
no sentirme con fuerzas y virtud
para valerme y bastarme.
En manos de Dios,
como niña pequeña.”
(encontrado en una nota de la Hna. Martha)
Busco un corazón puro y hago allí el lugar de mi descanso.
Imit. Lib. IV Cap. XII.
volverme otra, pero no yo,
sino dejarme volver
y convertirme por Dios.
En manos de Jesús,
a su disposición.
¡Que Él obre en mí
y por mí,
Él me reconcilie consigo!
Yo por la humildad desaparecer,
no creerme capaz,
no sentirme con fuerzas y virtud
para valerme y bastarme.
En manos de Dios,
como niña pequeña.”
(encontrado en una nota de la Hna. Martha)
Busco un corazón puro y hago allí el lugar de mi descanso.
Imit. Lib. IV Cap. XII.

Religiosas del Sagrado Corazón.